La popularidad de los juegos fabricados en China no deja de crecer en todo el mundo, y el productor de Phantom Blade Zero considera que las diferencias culturales juegan a su favor.
Tras el éxito multimillonario de Black Myth: Wukong, Phantom Blade Zero es el próximo luchador espectáculo chino que espera una acogida similar en todo el mundo. Se trata de un próximo juego de acción kung-fu con golpes de espada vertiginosos que recuerdan a Sekiro, escenarios caros que harían sonrojar a Nathan Drake y jefes corpulentos, pero, a pesar de las similitudes superficiales, no es otro Soulslike.